Colectivos de búsqueda exponen un sitio donde habrían sido eliminadas personas desaparecidas
En marzo del año 2025 salió a la luz un descubrimiento que ha conmovido al país, un grupo de colectivos de búsqueda, desmantelaron un rancho en Teuchitlán, Jalisco, donde se encontraron hornos clandestinos presuntamente utilizados para la incineración de cuerpos. Este hallazgo ha puesto en evidencia una de las prácticas más atroces de los grupos criminales en la región y ha resaltado la falta de intervención del gobierno en la lucha contra la crisis de desapariciones.
Los colectivos de búsqueda descubrieron tres hornos clandestinos en el rancho Izaguirre, ubicado en la comunidad de La Estanzuela. Estos hornos, de entre 1.50 y 2 metros de profundidad, eran utilizados para incinerar los cuerpos de las víctimas. Además, los buscadores encontraron diversas pertenencias personales, como carteras, ropa, aproximadamente 400 pares de tenis y botas, identificaciones, fotografías, cartas personales y altares a la Santa Muerte, lo que apuntó a la magnitud de los crímenes cometidos en el lugar.

GuerrerosJalisc/Twitter
Académicos y especialistas han comparado el hallazgo con campos de exterminio, destacando la brutalidad de los actos cometidos en el rancho. El historiador Jean Meyer expresó que este hallazgo es un
«insulto para la imagen que tenemos de nosotros mismos», señalando la urgente necesidad de una respuesta más efectiva del Estado mexicano para frenar la violencia del crimen organizado.
Cabe resaltar que, a pesar de la magnitud del descubrimiento, las autoridades mexicanas no participaron activamente en la investigación inicial. Fue Guerreros Buscadores de Jalisco y Madres Buscadoras de Jalisco quienes lograron poner al descubierto los horrores de este rancho, mientras que las autoridades locales tardaron varias semanas en asumir el control del caso. Esta demora ha sido criticada por los colectivos, quienes han resaltado que, aunque el gobierno finalmente se hizo cargo, la intervención de las fuerzas federales ocurrió demasiado tarde.
A pesar de las declaraciones iniciales de las autoridades estatales que descartaban la existencia de hornos para la incineración de personas en el rancho Izaguirre, la evidencia recabada por los colectivos ha dejado claro que el lugar fue utilizado para prácticas criminales relacionadas con la eliminación de cuerpos. Sin embargo, la Fiscalía General de la República (FGR) asumió la investigación una vez que los colectivos de búsqueda ya habían proporcionado pruebas contundentes.
El descubrimiento del Rancho Izaguirre expone la crudeza de la crisis de desapariciones en México y el papel crucial de los colectivos de búsqueda en la visibilización de estos crímenes. Si bien las autoridades han comenzado a investigar el caso, fue la labor del grupo de colectivos que permitió sacar a la luz este sitio clandestino.
Hasta el momento, no hay confirmación oficial sobre qué grupo criminal está detrás de estas operaciones clandestinas, y las investigaciones continúan en curso.
Abigail Ortiz
Periodista | Fundadora de Not Found Press
Instagram: @abi_0rtiz36